Etiquetas

2021/08/26

Agur Fito. Gracias por todo

Hoy vamos con una noticia triste... Muy triste.

Y es que, hace apenas unos días (aún estamos digiriendo la noticia) uno de nuestros compañeros nos ha dejado.

Fito Jiménez, un referente del medio ambiente y la ecología, ha fallecido con 71 años, siendo un ejemplo y un referente en múltiples causas sociales, humanitarias y medioambientales, tanto a nivel foral como estatal.

Hace unos años recibió el premio "Coagret" como reconocimiento a su trayectoria en defensa de una nueva cultura del agua y de los ríos. En su amplio curriculum, destacan los años que trabajó como responsable de Innovación y Proyectos en la Fundación CRANA en Navarra hasta su cierre. Reconocido experto en temas medioambientales, ingeniero químico y formado en distintas universidades como Ramon Llul en Barcelona, Miguel Hernández, o UPV acumuló una importante experiencia ya en su ejercicio práctico en identificación y diseño de proyectos, trabajó siempre
combinando los conocimientos técnicos (gestión de residuos, agua, energía, salud ambiental...) con la dimensión social. 

En su larga carrera destacan los más de 10 años de experiencia en cooperación al desarrollo y ayuda humanitaria en América Latina y más tarde su implicación con la educación ambiental y la participación social en los proyectos ambientales.

Siempre cuestionando desde la razón proyectos polémicos como los embalses de Itoiz y Yesa así como el Canal de Navarra, entre otros, ha sido un activista y un activo del movimiento ecologista y entregándose a múltiples causas sociales, la última quizá la de la "nueva cultura del agua" que
aboga por una nueva forma de gestión del agua y de los ríos. Sin duda alguna un luchador nato, remando muchas veces contracorriente.

Fito Jiménez se sumergió en mil y un proyectos, grupos de trabajo, movimientos, charlas, cursos... Muchas veces en torno a su especialidad que era el medio ambiente, pero también de otro tipo como el que llevó a colaborar con Medicus del Mundo de Portugal, país con gran relación con Mozambique.
Nunca dejó ese ir y venir sentimental y profesionalmente entre Latinoamérica y Euskal Herria desde una concepción de un mundo abierto con raíces propias, aunque el paso de los años y las razones personales le fueron asentando en Iruña.

El destino ha sido caprichoso y ha querido que Fito falleciese cerca del agua, en uno
de sus lugares preferidos; la Foz de Arbaiun. Lugar emblemático en el medio ambiente navarro que se lleva a nuestro compañero, al que recordaremos cada vez que veamos las aguas de la zona correr.

Arga Vivo - Arga Bizirik te echará de menos. Nos deja un buen activista, pero más aún, un buen amigo y mejor persona. Ojalá haya más "Fitos" que defiendan el agua como tu lo hacías. Nosotros seguiremos luchando por lo que más querías, no te quepa duda.

Agur Fito. Eskerrik asko.

Fito Jiménez en el río Arga. Foto: Mikel Saiz (Diario de Noticias)

 

2021/07/23

Aceptemos la demolición de Santa Engracia!!!!!!

 Como bien se sabe, la Confederación del Ebro (CHE) ha pedido al Ayuntamiento de Pamplona la demolición de la presa de Santa Engracia.

A pesar de ello, parece que NA+ va a acudir a los tribunales para alegar dicha resolución, alargando así este culebrón que no tiene fin.

La idea de recuperar el flujo natural del Arga, como dictan las directrices de la Unión Europea, parece que no gusta y que se prefiere ir contra natura perjudicando tanto a la fauna autóctona (la fauna exótica invasora está más cómoda en zonas represadas), como al propio río, ralentizando su marcha y parando unas aguas que tenían que correr (entre muchos otros argumentos).

Además, es curioso, pero en la memoria que en su día el propio Ayuntamiento presentó “Memoria valorada para la rehabilitación de Santa Engracia en Pamplona” realizado por “Nostratec”, se ve claramente en diferentes croquis cómo en las crecidas más habituales las zonas afectadas por las inundaciones son mayores con la presa reconstruida que sin ella.

En otras palabras; si se sale con la suya (rehacer la presa) quedará en evidencia que al Ayuntamiento le importa muy poco que los daños en la Rochapea por inundaciones sean mayores de lo que lo serían a día de hoy.

Un argumento que se está utilizando para su reconstrucción es que en Pamplona hay más presas y que por rehacer esta no pasa nada. ¿Por qué no empezamos a valorar eliminar más presas como ya decía una Memoria realizada por “Pluviales” que presentó el Ayuntamiento en 2018? En ella se hablaba de comenzar con una educación ambiental potente y dar a conocer los problemas que este tipo de infraestructuras en desuso generan. En ese documento ya se hablaba de eliminar la presa de Santa Engracia, al igual que la presa de la Harinera de Ilundain, cerca de Miluze. El que haya muchas presas es justificación para eliminar azudes, no para reconstruirlos.


Por otro lado, el supuesto argumento patrimonial se cae una vez más. La Asociación Hispania Nostra, que incluye en su lista roja de elementos patrimoniales en peligro a la presa de Santa Engracia, ha reformado la ficha correspondiente y habla de “mantener los restos más antiguos y valiosos de la presa, sin proceder a su reconstrucción”, haciendo “compatibles las dinámicas naturales del río Arga con la conservación de su patrimonio cultural”.

Desde la Asociación Arga Vivo – Arga Bizirik solo queremos que se pare ya con esto; que el resto de partidos políticos hagan recapacitar a NA+ en su cabezonería y que se deje de gastar dinero público en informes y estudios que no llevan a ningún lado, ya que hay una resolución bien clara de la CHE.

Aunque se nos llena la boca con el corredor fluvial, con memorias, con que si el Arga es el pulmón de Pamplona, con propuestas de trabajo para mejorar el río, con procesos participativos, todo esto no vale de nada si, a la hora de la verdad como es el caso, no se quiere ver la realidad.

Por un Arga que fluya, aceptemos las consideraciones jurídico-ambientales de la CHE, del Gobierno de Navarra y de la legislación europea, así como las patrimoniales de Hispania Nostra. Aceptemos que Santa Engracia no se repara y estudiemos la eliminación de otras presas en desuso, que tenemos Pamplona saturada.